Sustituto primoridial de la sal de mesa refinada. Aporte extra de oligoelementos y prevención de problemas derivados de una mala circulación, retención de líquidos, exceso de peso, malas digestiones, etc...
Una alternativa natural y saludable a la sal convencional es la sal de roca, sal rosada, o sal cristalina del Himalaya.
Proviene de yacimientos al pie del Himalaya, donde la sal marina cristalizó hace aproximadamente 250 millones de años, en la era secundaria cuando allí existía un gran océano, y allí ha permanecido fosilizada hasta nuestros días. Es una de las sales más ricas y especiales de las que podemos disfrutar, ya que guarda toda la pureza como ningún otro alimento, es muy rica en minerales y oligoelementos sin ninguna alteración ni proceso de refinamiento posterior, y guarda unas propiedades energéticas excepcionales.
Contiene 84 elementos que se encuentran en nuestro organismo, y los mismos que se encontraban en el "mar primitivo". Algunos estudios biofísicos hablan de "Sol Líquido", refiriéndose a la disolución de estas rocas de sal en agua, ya que han determinado que tiene una capacidad extraordinaria para almacenar energía fotónoica (del sol), y que su red cristalina contiene quantos de luz desde hace miles de años.