MELON: actualmente, gracias al número de variedades de esta fruta y a la existencia de cultivos en invernaderos, se puede disponer de melones durante todo el año. Sin embargo, su temporada real va desde mayo hasta septiembre, y fuera de esta época su precio es más alto.
Para conocer el grado de madurez del melón, debemos olerlo. Si desprende un aroma dulce y delicado, es que está maduro. Si no, puede dejarse varios días a temperatura ambiente hasta que se ablande, y posteriormente guardarlo en el frigorífico cuando esté a punto.
Cuando está muy maduro, suele ceder por la base a la presión de los dedos, y si los dedos se quedan pegajosos, es que ya está pasado. También se puede saber si está pasado cuando, al agitar y acercar el melón al oído se oye el ruido de las semillas y el jugo interior, así como cuando al abrirlos se descubre una carne rota, que parece helada.